JohnFx Contra los fantasmas
Un cuento navideño de arrabal embrujado
Capitulo 1: Moscas en la casa
El calor golpeaba siempre fuerte, sobre todo en esa época del año, parecía una burla a todo eso establecido como normas, fechas y demás convenciones sociales sobre el verano empezando el 21, pero carajo que hacían unos 35 grados bien veraniegos en esa primavera "pre-mediados" de diciembre.
Creo que no solo nos daba en el rostro con sus puños de calor, sino que también se burlaba de nosotros no respetando las fechas.
Dormir en esa temporada era prácticamente imposible, no solo por la maldita temperatura, sino por los jodidos mosquitos que parecían reproducirse como una comuna de hippies de los 60, no se podía saber bien si estabas en una jungla o en medio de la urbe, sumado todo esto a los inevitables escándalos que realizaban los infantes de vacaciones en la calle: ruidos, gritos, y la exasperante melodía del zumbido de los mosquitos en tu oído, la cual debe ser otra de las formas de natura de decirnos: “Al carajo con ustedes”.
Pues bien uno de estos bichos podía ser controlado, un tubo de insecticida y dormir medio drogado por el olor de este mata-pestes. Mientras inundaba mi cuarto con toxicas sustancias, por mis adentros pensaba :
-mmm, si puedo matar una horda de mosquitos con uno de estos tubos… me pregunto si uno grande… la plaga de afuera…-
O al menos a sus irresponsables padres que los dejaban estar en la calle a estas horas de la noche, no importaba, tenía que dormir algo.
Como siempre pasa por ley de la vida, una vez que logres conciliar el sueño en una situación difícil, algo te va a despertar. Fueron unos ruidos como a fierro, cadenas o algo así, lo primero que vino a mi mente fue que alguien se había metido a mi cuchitril, así que me levante rápido y agarre un palo de madera corto que imita ser una vara Kali (unos palos que agarran alta velocidad y usan algunos artistas marciales para machacar rostros hostiles) y un cuchillo de filo de la cocina como arma secundaria. Largue al perro a ver si decidía ser útil para variar, el cual corrió como si buscara un gato con un bife de lomo atado a la cola y detrás fui yo como un Comando atrás de la bomba de humo.
La noche no demostró tenerme preparada ninguna diversión ya que nadie había invadido la santidad de la morada nostra, volví a recostarme, sin embargo antes de poder caer en el reino de Morfeo, sentí otra vez ruidos, esta vez parecían venir como de otro sector, por lo que llegue a la conclusión de que estaban haciendo ruidos de una de las casas vecinas. Ya estaba muy cómodo en mi colchón, así que trate de dormirme una vez que mi canido compañero guardo silencio.
Capitulo 2: Indeseables visitas
La rutina en si no vario demasiado con el pasar de los dias, solo que se estaba complicando dormir a veces con los ruidos, había días mas molestos y días menos.
La vida en un barrio es así, están todos de joda menos uno, y si te molesta es porque tu espíritu represor tiene un gran bigote a flor de piel.
La situación se repitió igual que unas noches atrás: ruidos, asomarse a ver, encontrar nada.
-Carajo estos negros de mierda que bardo que hacen…-
Esa noche en particular fue bastante molesto el asunto, ya que los ruidos fueron más fuertes, parecía que realmente le estaban poniendo esfuerzo al asunto de no dejarme dormir, y claro esta, no quería despreciar sus logros; A lo que deje salir un grito…
-¡¡Eeeeh viejo, dejen de hacer quilombo que es tarde, quiero dormir algo!!!!-
Mi cortes petición pareció dar frutos, por lo cual pude volver a las irregulares llanuras de algodón barato en mis sabanas. Después de eso fue el colmo, los ruidos empezaron otra vez, por lo cual tome mi cuchillo de filo y decidí saciar mi frustración con algo, esta vez los ruidos parecían venir del fondo de mi casa. Otra vez el subidón de adrenalina e ir con el perro a ver que pasaba.
Fue raro, dado que no encontré nada, no obstante mi fiel can seguía ladrando, y al mirar hacia un costado veo moverse una sombra que se perdió en la espesura de la noche y el paisaje de mi casa, revise la casa una ultima vez sin encontrar ningún intruso, ni siquiera una alimaña extraña que provocara ese alboroto y decidí volver a mis aposentos, abrí la heladera y tome una botella con agua casi fría, ya que el calor no dejaba vivir ni a mis condenados electrodomésticos, al momento de beber, algo hace que vasos y otras cosas caigan de su lugar, pero al revisar seguía sin aparecer nada, ni siquiera una jodida rata a quien matar, ¿se trataría de fantasmas quizás?. Ahí fue cuando decidí que la boludez me estaba sobrepasando, debía parar.
Tanta vuelta me había puesto de mal humor, así que decidí bajar mi ímpetu beligerante con una ducha caliente. Definitivamente era lo que necesitaba, un chapuzón de agua termal, para combatir la calentura… combatir "fuego con fuego", la mejor manera.
Salí de la ducha, mire mi apelante atractivo al espejo para luego proceder a peinarme, busque en la caja donde guardo mis artículos de aseo, saque el peine y volví a mi posición original, cuando al mirarme al espejo encuentro un segundo hombre reflejado allí, lo cual logra hacerme voltear a mirar. Al darme vuelta, como era de esperarse no había nadie.
-Naaaaah, dejame de joder, ¿posta vas a hacer la de aparecer en el espejo?-
Todo eso me hizo pensar que estaba en algún tipo de película estadounidense de fantasmas trillada.
-¿Nunca se les ocurre nada mejor que aparecer en los reflejos? ¡Pero que gente pelotuda!-
El reflejo estuvo normal otra vez, así que quien fuera que estaba ahí también se había ido, y quizás mi cordura también (aunque es complicado saber si se fue algo que uno no esta seguro de tener).
Salí del baño y comenzaron por enésima vez los intolerables ruidos que venían de la sala, donde por enésima vez también nadie aparecía para hacerse cargo, no obstante, parecía haber un cierto "algo" proveniente del espejo que me observaba de la pared.
Mi reflejo se veía raro, ralentizado, como si respondiera a otras leyes físicas… fue ahí nomás cuando algo hizo clic.
-Aaaaah, no me digas que vas a hacer la de…-
No llegue a terminar mi frase cuando mi “yo reflejado” tomo el cuchillo que pretendía usar estos días para espantar cacos y comenzó a acercárselo a la yugular, casi con una poesía irónica.
-ssssssep… mas boludo de lo que pensaba. Ahora se supone que como aparezco cortado ahí, también me voy a empezar a desangrar acá, ¿no?-
El reflejo comenzó a cortarse partes del cuello y hombros, dejando heridas abiertas y sangre cayendo, mientras de este lado mis ojos se desviaban creando un gesto de despectiva frustración.
-Pero la puta madre, ni los fantasmas son más inteligentes. ¿Ves? ¡No me muero pelotudo!-
Algunas cosas cayeron de sus estantes entre tanto, solo para hacer que estuviera mas molesto, con todo ese ruido, mi cara de irritación y desden creció.
-¿Por que no me dejas de joder con los ruiditos así me duermo tranquilo ¿eh?, mañana te ayudo a que termines tus cosas de fantasmas.-
Pareció dejar tranquilo el espejo sangriento y las cosas que se caían, es así como pensé que habíamos llegado a un acuerdo entre hombres… o mejor dicho entre hombre y fantasma, lo cual fue bueno, porque todo eso de hablar con un espejo embrujao, no me parecía saludable. Logre dormir unas horas cuando volvieron los ruidos.
-¡Caaaarajo, mierda!!- Me levante, de la cama muy encabronado y fui al lugar de los ruidos.
-Ya me hiciste calentar, ahora no solo no te ayudo un carajo, sino que vas a cobrar, ya vas a ver.-
Corrió esa sombra que se movia acompañado por ese vientito frió, típico de estas situaciones de jolibud y tiro un par de cosas mas, mientras me iba a dormir mas enojado que antes. Una cosa era el calor, la gente dominguera o los mosquitos, pero ya entes sobrenaturales jodiendo, era demasiado.
Capitulo 3: SI VIS PACEM PARA BELLVM
No se como conseguí dormirme, después de tanta bronca, pero lo que era seguro es que estaba cansado de tanta “ cosa ‘e mandinga ”.
Lo primero era encarar, fría y lógicamente este asunto, lidiar con cosas paranormales no significa hacerlo a lo pavote.
Evidentemente la solución era simple, a problemas trillados, soluciones Nerd, tal que tome la decisión de acercarme a pedir ayuda a el único tipo de persona, que puede ayudar con un problema como este… un Nigromante.
Para los que no sepan: tratar con Nigromantes no es algo sencillo, suelen ser algo excéntricos, fríos, distantes, apáticos y además se les pega ese olor feo de tanto trabajar con zombis y necrófagos. Iba a necesitar mundo, cortesía, carisma y algún perfume o desodorante.
Pude por suerte encontrar a un nigromante conocido, que me podría llegar a ayudar con el asunto.
Fui hasta su puerta, y comente que necesitaba su ayuda con un asunto complicado, fue cortes y me invito a pasar para hablar de negocios.
Fx: -Necesito algún hechizo u Tótem, que me permita tocar materia ectoplasmatica en este plano.- dije.
Nigromante: -Mmmm… el trato con espíritus y demás es un tanto complicado, aunque a la vez típico; suelen estar atrapados en este plano, por traumas creados en su alma en esta vida, y buscan resolverlo o simplemente venganza, siempre están para algo en esta dimensión.-
Fx: -Si- respondí -esta para no dejarme dormir el hijo de puta, lo voy a cagar tanto a palos que no se si va a nacer otra vez, o a irse al Valhalla-
No podía creer que hasta un nigromante me diera una respuesta tan poco original.
Nigromante: -Pero, solo son almas torturadas que…-
Fx: -Que me joden el sueño.- Interrumpió Fx
Nigromante: -Bien, tengo alguna cosa para que puedas arreglártelas con el, lastima que no lo puedas ayudar.-
Fx: -Traté, pero no me presta atención el pete, así que se lo busco.-
El tramite no fue largo, me dio una manera de ver al molesto invitado y un ungüento para, brazos y puños.
Esa noche cuando empezaron los ruidos, estaba preparado, mande al perro a que mirara, me puse lo que me habían dado y al ver que mi amigo can ladraba a un rincón de la casa pude identificar al fantasma del arrabal (claro, del arrabal, no estábamos en la opera) un masculino de aproximadamente 1,75 y cara de boludo (en caso de que esos datos enriquezcan el relato).
Se ve que no entrenan mucho en el plano del inframundo porque al primer gancho al mentón, cayó al piso enseguida.
Como se podía esperar, mantener despierto a una persona por varias noches no se compensa con una mano, y bueno… simplemente siguieron las demás, estuviera en el piso o no.
El hechizo que me había provisto el nigromante se llamaba “Atormentar alma” y realmente funcionaba, ahora el atormentador era el atormentado (otra ironía trillada).
La cosa no duro mucho, como todo lo bueno. Desde la parte oscura del lugar se extendieron las sombras cual tentáculos alrededor del ente que embrujaba la casa, una silueta comenzó a acercarse a la pelea. La apariencia de aquel verdugo que irrumpió la disputa era una mezcla entre la parca y esos fantasmas que aparecían en la película “Ghost” para llevarse a los otros espíritus. Al llegar decidió tomar a aquel espíritu con intención de llevárselo no sin antes, apuntar con el dedo a quien estaba golpeándolo.
-Has negado el favor a un alma torturada, obligándolo a su descanso eterno sin dar clausura a sus problemas terrenales. Y por eso tú desinterés se ha cegado debido a tu cinismo, cometiendo el pecado de la ira.-
Fx: -Eeehmmm… yo…-
-Y por esto, deberás encontrar equilibrio durante las noches anteriores a la navidad, donde saldaras tu conciencia.- Interrumpió esa imitación barata del Segador, a la cual solo le faltaba la guadaña.
Fx – ¿Me estas amenazan…?-
Así como esa sombría figura se acerco a la escena sin denotar movimiento, fue como se alejo con el fantasma ya apaleado en brazos, flotando encima de la negrura como si no tuviera pies.
Debo admitir que tal escena fue “un algo desconcertante”, pero obviando eso el mensaje fue claro, iban a ajusticiar a alguien dentro de un par de días.
Capitulo 4: Peleas pactadas
Cuando uno de antemano sabe que puede tener problemas, tiene 2 opciones: la primera es temer y anticiparse, la segunda es prepararse lo mejor posible y dar batalla.
Semana de salir a correr, y entrenar duro. Además de eso algunas visitas extra a mi nuevo amigo el nigromante local, el que me contó que las visitas serian bastante similares a la última, lo cual me dejo tranquilo de que no iban a acribillar mi morada a disparos.
Se acercaba navidad y el calor pegaba mas duro que cualquiera, todos los que no teníamos el lujo del aire acondicionado, dudábamos nuestra preferencia por estar vivos, transpirar tanto era la peor tortura. Llego la tarde del 22 cuando me disponía a tomar un descanso como venia haciendo por la simple razón de tener energías por si a la noche pasaba algo. La temperatura colaboraba mucho a esta situación y pude conciliar el sueño rápidamente.
Paso poco tiempo desde que me desvanecí en la cama cuando me despertó mí mas reciente amigo el nigromante, aunque curiosamente no estaba apestando el cuarto.
Fx: -¿Que haces acá… como…?-
Nigromante: -Soy una proyección de un ser conocido…-
Fx: -Pero llegas temprano, me dijeron que venían de noche. ¿Qué vienen a hacer?
Nigromante: -Mi función consiste solamente en avisarte que en estas tres noches, te visitaran tres fantasmas a la una de la mañana.-
Fx: -¿Y que vienen a hacer?
Nigromante: - Has sido avisado.-
Luego de pronunciar “avisado” desperté, eran las 9 de la noche, me despabile mientras me abrumaba una rara sensación de Deja Vu, algo tenía en la punta de la lengua pero no podía darme cuenta de que.
Mirando el lado bueno del asunto ya estaba avisado de cuando vendrían los indeseables visitantes, hasta tendría tiempo de entrar en calor… de hecho, se empezaba a parecer como una pelea pactada.
Si alguien se pone a investigar sobre deportes de pelea se llega a encontrar con un evento mundial de mucho renombre llamado K-1. El K-1 World Grand Prix es una velada de artes marciales, donde los combatientes tienen 3 instancias a derrotar, siendo la ultima la final, es decir, 3 peleas en una noche. Esto es algo casi parecido solo que con 24 horas de diferencia entre los oponentes.
Aproveche la ventaja de saber la hora de la pugna e hice un precalentamiento, hasta me puse las vendas.
Se dieron la 1 AM y el subidón de adrenalina se comenzaba a sentir, espere afuera, atento a los ruidos con mi parcialmente fiel compañero perruno al lado mió. Sentí sonidos que venían del pasillo, me asome a ver… y ahí estaba caminando hacia mi, imponente, imparable y muerto.
Se detiene clavando su mirada en quien lo esperaba, alza una mano en señal de alto y dice:
Fantasma: -Soy el fantasma de las navidades pasadas.-
Fx: -¡AAAH!, yo sabia que de algún lado me sonaba lo de los 3 fantasmas.- exclame -Carajo no termina mas esto-
Fantasma: -Estoy aquí para mostrarte como tu actitud afectó a otras personas en navidades pasadas.-
Fx: -¿Ah? -
Fantasma: -Vamos a ver…-
Como era de esperarse nos transporto a ver momentos del pasado, me encontré en donde viví mis años de niño inocente y manipulable.
Fantasma: -En esta navidad, después de las 12 saliste a jugar con un vecino a la calle.-
Fx: -¡¡¡Dios!!! ¡¡¡Era un monstruo!!!.-
No creo que el fantasma entendiera el sarcasmo de los vivos.
Fantasma: -Ahora que terminaron de jugar, el quiere volver a su casa y como no hay nadie… tiene que terminar la navidad con su abuela y no su familia, solo hay que observar.-
Fx: -Emm… pero, eso es culpa de su familia que se fue, hasta mi santa madre fue a avisar que salíamos a jugar con anticipación.- dijo JohnFx
El fantasma pareció haberse quedado sin palabras
Fx: -¿Todo esto para mostrarme algo, que encima no fue culpa mía?-
Fantasma: -Solo tratamos de que entien…-
Fx: -Solo tratan de hacerme perder el tiempo, quiero volver a casa.-
Fantasma: - No puedo llevarte hasta que comprendas…-
Tenía el ungüento en el bolsillo, todo esto ya era demasiado, comencé a aplicar el hechizo, cuando el navideño espectro se detiene a preguntar:
Fantasma: - ¿Que es eso?-
Termine con el ritual y pase a explicarle con razones muy fuertes porque debíamos volver a mi casa.
Fx: - ¿Me vas a llevar ahora?- (golpe, golpe) - ¿si o no?-
Fantasma: -Esta bien, basta-
Volvimos a mi caluroso tugurio. El fantasma había comprendido a la perfección, sin embargo, dijo una cosa más antes de partir.
Fantasma: -Me voy, pero debo decirte que los otros fantasmas igual te visitaran, no esta en mi poder detener eso.-
Fx: -Bien, comprendo, fuera de mi casa entonces.-
Ahí es cuando JohnFx en realidad comprendió dos cosas, la primera es que las convenciones sobre los narradores omniscientes, testigos o protagonistas son una regla más que puede ser rota; Por eso ahora el narrador es omnisciente. Y lo segundo es que de una manera u otra todos pueden cumplir su sueño de estar en Japón en el K-1 world grand prix, ya que esas noches que restaban aparecerían otros dos entes que iban a tratar de hacerle perder el tiempo y lo mas probable, era que vinieran preparados. Seguro que el más jodido iba a ser el último, según el libro de Dickens… ese sabía el futuro.
Este fue un cuento de navidad llevado a ustedes por JohnFx inc. Los derechos de autor estan reservados a sus creadores.
Cualquier similitud con otras historias navideñas, de fantasmas o de barrio es debido a la falta de originalidad y talento de la sociedad moderna.
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